El conocido streamer Vitaliy “Papich” Tsal ha compartido recientemente sus impresiones sobre la película de 1967 La muerte a caballo (Death Rides a Horse). El creador de contenido no quedó impresionado, otorgando a la cinta una puntuación baja de 4 sobre 10.
En un mensaje publicado en su canal personal, Papich describió la película como un “western súper antiguo de 1967” que Quentin Tarantino incluso citó como inspiración para Kill Bill. Sin embargo, Papich señaló que las similitudes son mínimas, limitándose a un momento de reconocimiento de los villanos y una única pieza musical. Según él, al igual que la mayoría de los westerns de esa época, la película está “extremadamente mal hecha”, citando una “fotografía horrible”, la ausencia de sangre y la munición infinita tanto para héroes como para villanos.
La trama fue calificada por Papich como “primitiva, lineal y estúpida”, además de “bastante tediosa”, afirmando haber tardado más de tres días en verla debido a lo aburrida que le resultaba en ciertos momentos. Criticó también las “mismas localizaciones horribles” y los “bandidos feos y sin carisma con diálogos tontos” que, en su opinión, son comunes en las películas similares de ese período. Concluyó que el 99% de estos westerns antiguos son “basura” con acción primitiva, trabajo de cámara nulo, falta de daños por disparos y protagonistas invulnerables. Para él, “no hay nada particularmente interesante en la película”, salvo la ya mencionada canción de Kill Bill y los “buenos actores en los papeles principales”. Destacó a Lee Van Cleef, a quien considera que actuó en quizás el único western realmente bueno de esa era, El bueno, el feo y el malo, en medio de lo que él llama “trozos de mierda similares entre sí”. También comparó al actor principal de La muerte a caballo con una copia joven y menos “masculina” de Clint Eastwood, aunque bromeó diciendo que “menos masculino” en esa época significaba unas 100 veces más masculino que un actor promedio actual.
Papich reiteró su creencia de que ver westerns de los años 60 a 80 es una “lotería pura”, donde la búsqueda no es de oro o plata, sino “al menos de cobre” en un “montón enorme de porquería sin talento” producida en masa. Volvió a destacar Dos hombres y un destino (Butch Cassidy and the Sundance Kid) como el western “legendario” que se distingue de todas estas “copias baratas” de los westerns de Leone (de quien opina que dos de las tres películas de su trilogía son “mierda pura”). Considera Dos hombres y un destino, de 1969, como el “western más grande de todos los tiempos”, adelantado a su tiempo en 15-20 años tanto en calidad de filmación como en dirección. Elogió su “historia increíblemente cautivadora”, “fenomenal fotografía de exteriores” y protagonistas “ultracarismáticos”, señalando que segmentos como la escena de la persecución son “casi los mejores 20 minutos de cinematografía” que ha visto en su vida.
En resumen, su veredicto para La muerte a caballo es de 4 sobre 10, “solo por los actores principales”. La considera “primitiva, aburrida, sin talento”.
Para contextualizar, la película La muerte a caballo, estrenada en 1967, recibió una puntuación de 7 sobre 10 por parte de los usuarios de IMDb y de 7,2 sobre 10 en el sitio ruso Kinopoisk.