Gabriela Fundora completó con éxito su primer evento estelar, deteniendo a la boxeadora mexicana Marilyn Badillo en el séptimo asalto de su enfrentamiento en la división de peso mosca. El combate tuvo lugar en el Frontwave Arena de California, como parte de una cartelera organizada por Golden Boy Promotions.
Fundora retuvo su condición de campeona indiscutida, conservando intactos sus cuatro cinturones principales (WBC, IBF, WBA y WBO). Con esta victoria, la púgil de 23 años, conocida como `Sweet Poison` (Veneno Dulce), mejoró su impresionante récord a 16-0 con 8 nocauts. Demostró ser demasiado para Badillo, cuyo récord es de 19-1-1 con 3 nocauts. La mexicana nunca había peleado a este nivel y no pudo adaptarse a la exigencia.
Utilizando su potente jab como herramienta principal, Fundora logró encontrar el espacio para conectar la mayoría de sus golpes de poder, a pesar de que la retadora, de menor estatura, intentaba esquivar y salir del alcance. La tarea de Badillo se hizo aún más difícil cuando un hematoma comenzó a formarse y crecer en su cabeza, ofreciendo un blanco adicional para Gabriela.
Una fuerte combinación de derecha e izquierda, conectada mientras Badillo estaba contra las cuerdas, hizo efecto unos segundos después de impactar, provocando que la mexicana se desplomara en la lona. Al levantarse, Badillo tambaleó y sacudió la cabeza en señal de malestar en varias ocasiones antes de que el árbitro Rudy Barragán decidiera detener la pelea al minuto 1:44 del séptimo asalto. Fundora procedió a celebrar su importante triunfo.
“Estoy lista para conseguir más cinturones en otras divisiones”, declaró Fundora tras el combate.
Subir de la categoría de 112 libras parece ser el paso lógico a seguir, ya que Fundora ha dominado completamente este peso y quedan pocas rivales de su calibre. La intención parece ser que su imponente físico compita en divisiones superiores. Su equipo y promotores tendrán que planificar cuidadosamente el camino hacia sus próximos éxitos.