La etapa austriaca del Gran Premio Femenino de la FIDE marca el sexto y último evento de la actual serie de dos años. Este torneo es crucial, ya que las dos primeras clasificadas en la tabla general de la serie asegurarán su plaza en el próximo Torneo de Candidatas Femenino.
El formato es un torneo de liga a una sola vuelta con 10 jugadoras. El control de tiempo establecido para las partidas es de 90 minutos para los primeros 40 movimientos, seguidos de 30 minutos adicionales para el resto de la partida. Se añade un incremento de 30 segundos por movimiento a partir del movimiento 1.