Keith Thurman no perdió tiempo en desestimar las posibilidades de Brock Jarvis durante su rueda de prensa hoy en Australia.
Los dos púgiles de peso superwélter se enfrentarán en el evento principal a 10 asaltos el miércoles en el Hordern Pavillion en Sídney. Thurman está a miles de kilómetros de su casa y peleando por primera vez desde su victoria sobre Mario Barrios en febrero de 2022.
El púgil de 36 años, sin embargo, arremetió contra Jarvis en repetidas ocasiones en la rueda de prensa final e insinuó un combate reprogramado contra Tim Tszyu en el futuro.
“El mundo verá lo que Thurman trae a la mesa, y a partir de ahí, ya sabes, solo estaré esperando el próximo contrato.
“Ya firmé un contrato contra Tim Tszyu una vez. Fue un evento desafortunado. No pudimos hacerlo, tal vez este sea el año”.
En cuanto a la amenaza que tiene delante esta semana, Thurman, de 30-1 (22 KOs), criticó duramente a Jarvis con su típica disección verbal.
“Se mueve como una caja de cartón con ruedas, hombre. Un tablero de Tetris en acción. Es cuadrado como la mier**. El chico no tiene movimiento de cabeza”, dijo.
“Soy dos veces campeón mundial, he visto esto una y otra vez. No estoy tratando de subestimarlo. Solo estoy analizando a quien me ponen delante. Es cuadrado y piensa que va a lanzar bombas a un anciano”.
Jarvis, de 22-1 (20 KOs), parece estar en apuros contra ‘One Time’ sin evidencia en su historial que sugiera que pueda dar la sorpresa, pero la edad de Thurman, sus problemas de lesiones y la inactividad son motivo de preocupación para el estadounidense. El underdog australiano llega a la pelea con solo una derrota en su récord de 23 peleas. Pero esa única derrota llegó a manos de Liam Paro en un nocaut en el primer asalto difícil de digerir del que ha tenido que reconstruirse.
El púgil de Marrickville de 27 años se mostró muy intenso hoy y dejó claro lo que planea hacer con su invitado extranjero.
“Keith, te voy a golpear. Y te voy a lastimar. Que lo sepas. Cuando supere el primer asalto, te voy a hacer un agujero en la cabeza”.
“Le miré el otro día y no parecía estar listo en absoluto. Parecía que estaba participando en una clase de yoga”.
Las cosas se calentaron aún más cuando los dos se encontraron cara a cara, pero el promotor George Rose se interpuso entre ellos asegurándose de que toda la acción se guardara para el miércoles.