Mark Jeffers se sintió devastado al enterarse de que su esperado combate contra Osleys Iglesias, previsto como eliminatoria final de la Federación Internacional de Boxeo (FIB), había sido cancelado.
Ambos púgiles exploraban la posibilidad de enfrentarse en el Louis Armstrong Stadium de Nueva York el 12 de julio, formando parte de la cartelera de Shakur Stevenson contra William Zepeda.
Pero a pesar de que las negociaciones avanzaron a buen ritmo y alcanzaron lo que Jeffers (con récord de 20-0, 7 KOs) consideró una conclusión satisfactoria, el choque de peso supermediano finalmente se frustró.
Como era de esperar, la cancelación de la pelea fue una noticia decepcionante para Jeffers, quien, según se supo, regresaba de una semana de celebraciones por su boda en España.
“Estuvimos una semana completa en Mallorca, y tuvimos una fiesta en barco después de la boda”, comentó. “Así que sí, fue una semana especial.”
“Pero seguí entrenando. Hay un gimnasio de boxeo allí, así que lo usé, además de hacer algunas carreras. El día de la boda, hice una carrera de ocho millas”, añadió, mostrando su compromiso.
A pesar de mantener su ética de trabajo incansable, el púgil de 27 años finalmente tuvo que aceptar el hecho de que Iglesias (13-0, 12 KOs), un formidable contendiente de nivel mundial, ya no sería su próximo oponente.
En su lugar, el boxeador originario de Lancashire se enfrentará a Sean Hemphill el 7 de junio, apareciendo en la cartelera del combate por el título europeo de Callum Simpson en el Oakwell Stadium de Barnsley.
Pero antes de que se le presentara una opción alternativa, Jeffers creía firmemente que los preparativos para su pelea con Iglesias estaban en marcha.
“Enviaron una oferta, la aceptamos, y luego todo quedó en silencio”, relató. “En mi cabeza, iba a suceder el 12 de julio en Nueva York. Pero para ser honesto, no sé la historia completa detrás de la cancelación”.
“[Que la pelea no sucediera] no tuvo nada que ver con nuestro lado. Recibí un mensaje en mi camino de regreso de [Mallorca] diciendo que la pelea no seguiría adelante”.
“Me sentí destrozado. Ese habría sido mi sueño: pelear en una cartelera masiva en Nueva York, pero no tiene sentido lamentarse por ello. Ahora estoy completamente enfocado en el 7 de junio”, afirmó.
Más allá de su próximo compromiso, Jeffers, clasificado número seis por la FIB, busca medirse en el panorama mundial.
Ya sea contra Iglesias, o quizás contra otro formidable contendiente de las 168 libras, `The Dog` está decidido a probarse al más alto nivel.
“Siento que necesito una gran prueba, solo para ver qué tan bueno soy realmente”, insistió. “Todos hablan de Iglesias, que nadie quiere acercarse a él, pero denme a cualquiera de los nombres importantes y veremos qué tan buenos son ellos”.
“Creo que se necesitará un boxeador muy especial para vencerme”, concluyó con confianza.