Dr. Ezekiel Adamu, uno de los promotores de boxeo más influyentes de África, expresa su confianza en que cualquier desafío inicial será resuelto eficazmente antes de su próximo evento, programado para el 19 de diciembre.
Su velada más reciente, titulada de forma muy apropiada `Chaos in the Ring`, fue testigo de la contundente victoria por nocaut del peso crucero Brandon Glanton sobre Marcus Browne en Lagos, Nigeria, a principios de este mes.
El evento, en términos generales, fue un éxito rotundo, un logro significativo si se considera la limitada tradición de la nación de África Occidental en la organización de espectáculos de este calibre a lo largo de los años.
No obstante, la afición no tardó en expresar su desconcierto en redes sociales en relación con un combate específico, el protagonizado por el carismático peso supermedio Elvis Ahorgah.
El púgil ghanés parecía encaminarse hacia una clara victoria sobre Dossou Faustin Houenou, mostrando un dominio considerable en el ring, aunque su actuación no justificaba una detención prematura. Sin embargo, una intervención abrupta dejó perplejos a los asistentes.
Adamu explicó que fue el presidente de la Junta de Control de Boxeo de Nigeria (NBBofC) quien decidió detener la pelea. Esta decisión se tomó tras recibir una llamada de la Autoridad de Boxeo de Ghana (GBA) informando que Ahorgah no poseía la licencia requerida.
Sin embargo, la GBA desconocía que Elvis había obtenido su licencia directamente de la NBBofC para competir en Nigeria, habiendo superado previamente todos los exámenes médicos pertinentes. Una vez aclarada esta situación, el combate pudo reanudarse sin mayores inconvenientes.
Finalmente, Ahorgah se adjudicó una clara victoria por puntos, pero su continuidad en el cuadrilátero solo fue posible una vez que sus credenciales fueron debidamente confirmadas.
Esta cautela se interpretó como una respuesta a la reciente suspensión del boxeo en Ghana, donde las prácticas de la GBA en materia de seguridad para los púgiles han sido objeto de un intenso escrutinio tras la trágica muerte de Ernest Akushey el mes pasado.
En cuanto al compromiso de la NBBofC con la seguridad de los deportistas, Adamu cree que la preocupación es significativamente menor. No obstante, reconoce que la comisión africana está lejos de ser perfecta.
«Para ser honesto, hay mucho margen de mejora», admite Adamu. «Cuando se organizan eventos de boxeo sin un escrutinio constante, uno puede permitirse ciertas libertades. Pero ahora, con la NBBofC bajo el ojo público, se verán obligados a actuar de la manera más correcta y eficiente posible para garantizar la seguridad de los boxeadores.»
«El 19 de diciembre se acerca, y estamos convencidos de que todos estos problemas se habrán resuelto antes del evento», añade el promotor.
«Nunca hemos tenido problemas graves con la seguridad. Para ser justos con la comisión, realizan un trabajo realmente bueno en este aspecto», afirma.
«La razón fundamental para detener la pelea de Ahorgah fue precisamente la preocupación por la seguridad», concluye Adamu, subrayando la prioridad de la integridad física de los boxeadores.
Próximamente se espera un anuncio oficial detallando el evento de Adamu del 19 de diciembre. El promotor ya ha adelantado que la velada estará estelarizada por un «peso pesado británico-nigeriano», lo que promete un gran atractivo para la afición.
Respecto al impacto de su espectáculo de principios de mes, Adamu considera que ahora se encuentra en una posición mucho más ventajosa para atraer a figuras de renombre al boxeo nigeriano.
«Se trataba de demostrar nuestra capacidad para organizar eventos de clase mundial aquí en Nigeria y, en general, en África», afirma sobre la cartelera encabezada por Glanton vs Browne. «Creo que disipamos todas esas dudas sobre si `¿África puede lograrlo? ¿África puede hacerlo?`»
«Cuando organizamos boxeo en África, es más que un evento; es una experiencia, una fiesta, una fiesta del boxeo. Queremos forjar nuestra propia identidad», finaliza Adamu, expresando su visión apasionada por el futuro del deporte en la región.