The highly anticipated flyweight contest between Yankiel Rivera and Angelino Cordova in Orlando, Florida, devolved into a chaotic affair filled with clinches, headbutts, and rabbit punches, culminating in a controversial draw. Rivera, an unbeaten technician with a 7-0-1 (3 KOs) record, was widely expected to secure a clear victory.
However, the frenetic and often messy nature of the fight seemed to cloud the judges` perception. Cordova (19-0-2, 12 KOs) exhibited a reckless style, frequently stumbling and launching wild, ineffectual attacks, which Rivera largely evaded with controlled footwork. Despite an early opening in the second round, Rivera failed to fully exploit Cordova’s defensive vulnerabilities.
As the fight progressed, it became increasingly ugly, largely due to Cordova`s aggressive and foul-laden tactics. He repeatedly charged head-first into range, disrupting Rivera`s attempts to employ cleaner and more effective boxing. Cordova’s lack of stability led to a fourth-round knockdown, yet he continued with his bizarre, wild offensive.
The referee, Luis Pabon, eventually intervened in the sixth round, deducting a point from Cordova for hitting Rivera on the back of the head. By this point, it seemed clear that Cordova, whose only virtue was remarkable durability, was significantly behind on the scorecards due to persistent infractions, including headlocks in the eighth round.
Rivera, while maintaining superior footwork, appeared to settle for a controlled performance rather than pushing for a decisive statement. Yet, his moments of complacency allowed the ill-disciplined Cordova, with his unorthodox style, to pose unexpected challenges.
The announcement of a draw, particularly with a puzzling 111-115 scorecard from judge Robert Hoyle favoring Cordova, came as a considerable shock, especially given that the fight included two 10-8 rounds. Despite the baffling verdict, both fighters seemed content, while spectators were likely eager to put the chaotic spectacle behind them.
Traducción al Español: Yankiel Rivera se vio privado de una clara victoria sobre Angelino Cordova
El muy esperado combate de peso mosca entre Yankiel Rivera y Angelino Cordova en Orlando, Florida, degeneró en un asunto caótico lleno de agarres, cabezazos y golpes bajos, culminando en un controvertido empate. Rivera, un técnico invicto con un récord de 7-0-1 (3 KOs), era ampliamente considerado el favorito para conseguir una victoria clara.
Sin embargo, la naturaleza frenética y a menudo desordenada de la pelea pareció nublar la percepción de los jueces. Cordova (19-0-2, 12 KOs) mostró un estilo imprudente, tropezando con frecuencia y lanzando ataques salvajes e ineficaces, que Rivera esquivó en gran medida con un juego de pies controlado. A pesar de una oportunidad temprana en el segundo asalto, Rivera no logró explotar completamente las vulnerabilidades defensivas de Cordova.
A medida que avanzaba la pelea, esta se tornó cada vez más desagradable, en gran parte debido a las tácticas agresivas y llenas de faltas de Cordova. Este cargaba repetidamente con la cabeza por delante, interrumpiendo los intentos de Rivera de emplear un boxeo más limpio y efectivo. La falta de estabilidad de Cordova resultó en una caída en el cuarto asalto, pero aun así continuó con su extraña y salvaje ofensiva.
El árbitro, Luis Pabon, finalmente intervino en el sexto asalto, deduciendo un punto a Cordova por golpear a Rivera en la parte posterior de la cabeza. En este punto, parecía claro que Cordova, cuya única virtud era su notable durabilidad, estaba significativamente por detrás en las tarjetas debido a sus persistentes infracciones, incluyendo agarres de cabeza en el octavo asalto.
Rivera, aunque mantuvo un juego de pies superior, pareció conformarse con una actuación controlada en lugar de buscar una declaración decisiva. Sin embargo, sus momentos de complacencia permitieron que el indisciplinado Cordova, con su estilo poco ortodoxo, le planteara desafíos inesperados.
El anuncio de un empate, particularmente con una desconcertante tarjeta de 111-115 del juez Robert Hoyle a favor de Cordova, fue una sorpresa considerable, especialmente dado que la pelea incluyó dos asaltos con puntuación de 10-8. A pesar del veredicto desconcertante, ambos luchadores parecían satisfechos, mientras que los espectadores probablemente estaban ansiosos por olvidar el caótico espectáculo que acababan de presenciar.